Últimos días de octubre
Esa tarde, en el café de siempre, o de casi siempre, sus ojos me hablaron una vez más de la tristeza que su boca nunca quiso contarme. Sus ojos siempre hablaban de tristeza; su boca, en cambio, sonreía lo más del tiempo, enseñando unos dientes pequeños y chuecos como si fueran fragmentos de una risa ajena.
Y, aunque hablaba de cosas intrascendentes, en cada palabra, en cada frase, parecía que el alma quería escapársele por los ojos. Y por las manos, que se movían como queriendo extraer respuestas del aire.
De pronto, su semblante cambio. Sus manos dejaron de revolver el espacio, aterrizaron en la mesa, y con un dedo comenzó a dibujar el contorno de la taza ya vacía…
-Mi sonrisa es de mentira- dijo-. Sonrío por costumbre, así como digo “bien”, cada vez que me preguntan cómo estoy. De este modo, te ahorras un montón de explicaciones que nadie quiere oír.
Me dieron ganas de decirle algo cariñoso, como tarado o imbécil, (siempre uso adjetivos ofensivos para demostrar afecto; los verdaderamente cariñosos me da una vergüenza tremenda pronunciarlos), y tuve el impulso de revolverle el cabello como se hace con un niño que ha dicho una tontera. Callé, sin embargo, contuve el impulso y sólo sonreí… por costumbre.
La música dejó de sonar, y en el breve silencio que flota entre una canción y otra, se quedó pensando y dijo:
-La vida no tiene banda sonora.
Luego, pagué la cuenta, y me marché… tan solo como había llegado, sin banda sonora, pero con esa molestosa voz “en off” que nunca me deja en paz.
Esa tarde, en el café de siempre, o de casi siempre, sus ojos me hablaron una vez más de la tristeza que su boca nunca quiso contarme. Sus ojos siempre hablaban de tristeza; su boca, en cambio, sonreía lo más del tiempo, enseñando unos dientes pequeños y chuecos como si fueran fragmentos de una risa ajena.
Y, aunque hablaba de cosas intrascendentes, en cada palabra, en cada frase, parecía que el alma quería escapársele por los ojos. Y por las manos, que se movían como queriendo extraer respuestas del aire.
De pronto, su semblante cambio. Sus manos dejaron de revolver el espacio, aterrizaron en la mesa, y con un dedo comenzó a dibujar el contorno de la taza ya vacía…
-Mi sonrisa es de mentira- dijo-. Sonrío por costumbre, así como digo “bien”, cada vez que me preguntan cómo estoy. De este modo, te ahorras un montón de explicaciones que nadie quiere oír.
Me dieron ganas de decirle algo cariñoso, como tarado o imbécil, (siempre uso adjetivos ofensivos para demostrar afecto; los verdaderamente cariñosos me da una vergüenza tremenda pronunciarlos), y tuve el impulso de revolverle el cabello como se hace con un niño que ha dicho una tontera. Callé, sin embargo, contuve el impulso y sólo sonreí… por costumbre.
La música dejó de sonar, y en el breve silencio que flota entre una canción y otra, se quedó pensando y dijo:
-La vida no tiene banda sonora.
Luego, pagué la cuenta, y me marché… tan solo como había llegado, sin banda sonora, pero con esa molestosa voz “en off” que nunca me deja en paz.
23 comentarios:
Carajo, qué real! Esto si que es la vida misma!
Es verdad, la vida no tiene banda sonora, pero nosotros estamos hablándonos todo el rato desde no se sabe dónde...
Y sonreir por costumbre, responder que todo está bien, por costumbre, para evitar que los demás desconecten cuando les contamos nuestra realidad... qué cierto es!
Y no es por costumbre, amigo, pero... breve y genial!
Ya lo dijo Baltasar Gracián:"Lo bueno, si breve, dos veces bueno".
Un abrazote!
Me pregunto si la banda sonora tenemos que buscársela nosotros, cada uno de nosotros, sin esperar que sea la vida la que nos la ofrezca.
¡Qué solo debe sentirse, si cree que realmente nadie quiere oir sus explicaciones! Aunque eso... nos pasa a todos en ocasiones, ¿verdad?
Bon relat. Una abraçada des de Berlin.
Pues no estoy de acuerdo con eso de que la vida no tenga banda sonora, pero eso es otro cuento, ahora lo que importa es decirte lo bueno que está este relato y que en su "crudeza" (o será sinceridad) nos cuenta ese trocito de verdad.
Un abrazo!
Me encantó, es un poco como es uno. Yo siempre intento sonreir pa no dar explicaciones y, salvo ciertas ocasiones, siempre "estoy bien" =)
Una pregunta... Se te ocurrió o te acordaste, cuando te dije que me cargaba el stgo en 100 de la voz en off? =P
Saludos Fantasma
Nada mas que la verdad: la vida no tiene un soundtrack. Y si lo tuviera, habrian tantos y sonarian cada vez que alguien anda por ahí que ruido lo llenaría todo.
Un abrazo,.
atte:
Paz
Tristancio,las fotos de esa puerta y de esa soga son algo por lo que nunca te he felicitado. Corrijo mi desantencion haciendolo ahora: Felicitaciones!
Un abrazo
Igual súper esquizo el tipo que se va escuchando las voces xD
Tristancio, hoy vengo a publicitar mi nuevo sitio http://mataatuex.com.ar para aquellos que quieran desquitarse de una mala relacion
Te dejo un abrazo y perdon por el spam!
Saludos
No sabes como me he identificado en ese post. Imagino que todos en algún momento hemos sonreido por costumbre y ese "bien" es lo primero que escapa de nuestros labios, pero que la vida no tiene banda sonora es muy descriptivo, ¿sabes? creo que por eso todo el mundo lleva MP3 hoy día, buscan su banda sonora
Besos
Siempre que me paro en tus benditos salgo con escalofríos. Creo que es tu voz en off.
Sigo creyendo que eres grande, muy grande.
Besos, abrazos, y todo lo que le tape la boca al silencio
cuando era niño, me imagina la vida como su fuera una pelicula, e incluso me inventaba la banda sonora. Luego creci y todo quedo en silencio...
Me interesó la apatía de ese personaje que sonríe por costumbre y dice que está bien para evitar las explicaciones. Y la voz "en off"..., esa banda sonora es inacabable. Un abrazo.
¿cómo que no tiene banda sonora? tiene la que tu quieras poner...
Por suerte a veces la vida nos pone música de fondo y nos hace bailar, aunque sea sólo un ratito.
Saludos!
la vida tiene banda sonora!cómo qué no? tengo la curiosa costumbre de evocar personas lugares momentos escenas de mi vida...y entre ellas se encuentra enredada alguna canción triste o no(la más de las veces triste, cuando no con un dejo de tristeza aunque más no sea...)...creo también que la vida se desata así tan simple como tu texto y tan mágica...
Madre mia si supieras las veces q sonrio sin ganas, las veces q repito bien, cuando quiero decir como una mierda, la de veces, miles que paseo por la vida...
muakkkkkk
( acabaste la mujer justa?))))
Que bien lo retratas... y hay tanta gente así...
Vaya, inquietante, me ha gustado. Y también eso de que se escape el alma por los ojos.
Y la vida sí que tiene banda sonora. En eso no estamos de acuerdo.
"como si fueran fragmentos de una risa ajena.
como queriendo extraer respuestas del aire.
Mi sonrisa es de mentira
contuve el impulso y sólo sonreí… por costumbre.
-NUESTRAS vidas no tienen banda sonora."
Ambos estan solos , no se atreven a comprometerse en un vínculo afectuoso , disimulan , simulan , el silencio los rodea , excepto esa voz en off que obtura toda melodía .
Breve , contundente , tristemente real .
la soledad, las màascaras que uno se pone para ir escondiéndose nos matan a fuego lento...
La vida no tiene banda sonora : silpmemente sublime, veraddero.
**
méxico se destaca por su celebracion de la muerte y burla de ésta. es una mezcla perfectamente lograda entre costumbres pre-colombinas y el catolicismo. la muerte es una aliada, y no se le teme. las calaveras, versos burlones y comicos son el vestigio de una relacion con el otro lado .
no siendo mexicana quizà no lo explique muy bien, pero si, aqui se vive el dia de los muertos de una manera completamente diferente a la de otros lugares...
**
un dulce saludo.
Usted siempre logra hacerme un nudo en la garganta. Buena Vibra
Que triste Tristán, la vida sin BSO no es vida, pero mas aún quedarse sin palabras, pareciera que está hablando consigo mismo y me lo imaginé mas triste aún...
un abrazo
muy buenos post
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