La pedagogía de los sueños
Ahora que ya no sé soñar y que no vivo esperando buenas noticias. Ahora que tampoco espero a nadie en la estación del metro, y que me emborracho solo en bares perdidos sin compadecerme, o que sin compadecerme me emborracho perdido en bares solos. Ahora que me levanto temprano de lunes a viernes, aunque no tenga ganas, y que el viernes no importa porque es igual al lunes. Ahora que los días pasan sin sobresalto, miento. Miento como canalla, porque ahora que ya no sé soñar ni dormido, de lunes a viernes, en una escuela olvidada, enseño a soñar…
Ahora que ya no sé soñar y que no vivo esperando buenas noticias. Ahora que tampoco espero a nadie en la estación del metro, y que me emborracho solo en bares perdidos sin compadecerme, o que sin compadecerme me emborracho perdido en bares solos. Ahora que me levanto temprano de lunes a viernes, aunque no tenga ganas, y que el viernes no importa porque es igual al lunes. Ahora que los días pasan sin sobresalto, miento. Miento como canalla, porque ahora que ya no sé soñar ni dormido, de lunes a viernes, en una escuela olvidada, enseño a soñar…